RADIO EN VIVO

4 de diciembre de 2014

Actitud para dar la vuelta

(territorio.com.ar) River reaccionó a tiempo ayer en Medellín. Arrancó perdiendo, pero Pisculichi marcó un golazo para dejar igualada la serie final.
Atlético Nacional y River quedaron ayer igualados en la primera final de la Copa Sudamericana, que tuvo un atractivo partido de presentación. Berrio Meléndez y Leonardo Pisculichi marcaron los goles de la igualdad en 1 con la que terminó el duelo en Medellín.
Un tiempo para cada uno terminó siendo el panorama de la primera final de la Copa Sudamericana. River, perdido en la primera parte, salió con otro temple en el complemento.
Atlético Nacional, que pareció llevarse por delante a su rival en los 45’ iniciales, fue otro equipo en la última etapa.
Por eso el partido no tuvo dueño. Ninguno fue lo efectivo que mereció y los tantos de Berrio, en la primera etapa, y Pisculichi en la segunda, terminaron siendo los únicos del choque en el estadio Girardot.
La conquista colombiana llegó a los 35 minutos del inicio, con una de las tantas corridas de Berrio por las espaldas de un Vangioni que nunca entendió si debía dedicarse al ataque o refugiarse en la defensa. Aprovechó el veloz mediocampista colombiano, que una vez dentro del área definió fuerte hacia la red, dejando en el medio al seguro Barovero.
Con muchas chances pero poca claridad, Atlético Nacional se vio frustrado en su intento por aumentar la ventaja. River, que cuando no puede crear se refugia de la mejor manera, sólo soportó la tormenta, que finalizó con el primer tiempo.
Otro partido se vio cuando el brasileño Marques indicó el inicio de la última parte. River cambió la cara, fue muy superior y sólo pasó por una situación clara de peligro. Fue el tiro en el travesaño a los 16’ por parte de Pérez, que envió su cabezazo directo a las espaldas del arquero Millonario.
El distinto que tiene Gallardo fue otra vez la clave para igualar las acciones. Pisculichi, a los 20’, se animó desde lejos y clavó su remate en la red de Armani, que arrancó tarde su vuelo y vio quebrada su resistencia.  River volvió a mostrar actitud, y se vuelve de Colombia con ilusión cierta e intacta.